Unigestion: Bancos centrales y altas valoraciones brindan una prima atractiva en la volatilidad
Los expertos de Unigestion han publicado un informe donde destacan que, ante el clima actual, resulta atractivo seguir muy de cerca el comportamiento de la volatilidad para obtener rendimientos. Una vez más, destacan, un aumento sostenido de la volatilidad no se materializó en 2019 a pesar del mayor riesgo geopolítico derivado del Brexit, las guerras comerciales, o las tensiones en Hong Kong, Irán, y Latinoamérica. Estos eventos ya no parecen asustar al mercado, según los especialistas de Unigestion: Los inversores se están acostumbrando lentamente a la presencia constante de estos problemas y reaccionan ante ellos de una manera menos emocional. De ahí a que consideren que el mayor riesgo “proviene de los bancos”. Estos han sido, y siguen siendo, el “motor clave de la volatilidad entre activos”.
La operativa con la volatilidad proporciona “exposición a la inseguridad con respecto a un futuro desconocido”, destacan. Un mercado de volatilidad corta es una señal de confianza en el entorno actual, mientras que una posición de volatilidad larga es una forma de expresar el temor de que se produzca un cambio. Así, el VIX, medidor del entorno volátil, se ha movido constantemente más alto desde 2012, alcanzando niveles más elevados en agosto de 2015 y febrero de 2018.
La cobertura ha caído en desgracia, pero estos expertos no piensan que los inversores no estén sufriendo todavía una verdadera “fatiga” para cubrirse. Aunque el mercado volátil prolongado ha sido doloroso durante mucho tiempo, la estructura de unos vaivenes más abruptos (a corto plazo frente a largo plazo), junto con la media de la volatilidad, indica que los operadores en este entorno “aún no se han vuelto complacientes”. La mentalidad agresiva de comprar en caídas y, en consecuencia, la rápida reversión de la volatilidad media ha sido muy dolora para las coberturas de las carteras. Los inversores parecen haber entendido que, si no monetizan sus coberturas de inmediato, “la ventana de oportunidad se ha ido”.
Desde su punto de vista, la liquidez “impulsa a los mercados”. El segundo pico de volatilidad en 2018 siguió cuando el mercado comenzó a sentir la incomodidad de la normalización de tipos de la Fed. Cuando el crédito es de fácil acceso y los tipos de interés son bajos, la volatilidad permanece leve, pero a medida que hay menos laxitud, esta aumenta. De este modo, este año, a pesar de que la volatilidad entre activos está muy comprimida. Por lo tanto, desde Unigestion están convencidos de que el soporte de los bancos centrales, las altas valoraciones en las clases de activos tradicionales y el hambre de tener altas rentabilidades ofrece “un excelente entorno para cosechar una prima de volatilidad”.