TechRules cree que el futuro del asesoramiento financiero camina hacia un modelo completamente híbrido
Aunque antes de la pandemia del coronavirus la banca privada parecía acelerar la digitalización de las operaciones transaccionales (según datos del INE, en el año 2020, aproximadamente 2 de cada 3 inversores hicieron gestiones económicas de forma online a través de distintas webs o aplicaciones móviles), después del Covid los datos indican que las herramientas digitales han crecido exponencialmente.
Las entidades financieras comenzaron a desarrollar fuertemente hace unos años un modelo de asesoramiento híbrido sobre inversiones, en el que los clientes pueden recibir recomendaciones digitales gracias a algoritmos avanzados sin perder la atención personalizada y la interacción humana con sus asesores.
Según afirman desde TechRules, el hecho de contar con un modelo de Robo Advisor híbrido “ofrece grandes ventajas cuando se dan distintos escenarios como por ejemplo si el cliente es escéptico y no confía ciegamente en máquinas totalmente automatizadas por lo que le interesa también contar con los servicios de un administrador de inversiones”. También apuestan por este modelo cuando el inversor tiene un gran patrimonio y prefiere tener una atención personalizada y profesional en la que pueda compaginar objetivos fiscales y financieros (revisión de pérdidas fiscales, planificación financiera, cálculos de patrimonio neto, etc.); o quizás cuando el cliente tiene mucha incertidumbre y experimenta dudas y preocupaciones financieras que pueden ser resueltas de forma personal por un asesor.
En definitiva, indican desde TechRules, “existen muchos tipos de clientes que prefieren un Robo-Asesor híbrido que incluya los servicios de un asesor humano. Para estos clientes siempre es un consuelo tener a un profesional con quien hablar”. Además, dado que en los últimos tiempos los mercados financieros están fluctuando como consecuencia de los momentos inciertos que hay en la actualidad, “este tipo de Robo Advisors híbridos abre una vía actual con cliente existente muy interesante para la mayor parte de las entidades”.
En el caso concreto del Robo Advisor híbrido de TechRules, afirman desde la entidad que “los inversores contarán con una plataforma que les permite completar un cuestionario sobre sus objetivos y su tolerancia al riesgo”. En función del resultado obtenido, el Robo Advisor les recomendará las carteras en las que deberían invertir puesto que son aquellas que mejor se ajusten al tipo de perfil parametrizado para cada entidad -conservador, moderado o agresivo-.
De este modo, según TechRules “podrán gestionar sus patrimonios de forma más rápida y eficiente a la par qué estando constantemente en contacto directo con sus gestores financieros, los cuales proporcionarán un valor añadido adicional al verificar y tramitar sus inversiones de forma presencial”.