Schroders: ¿Cómo ha afectado el Brexit a la economía del Reino Unido dos años despúes?
Por Azad Zangana, Senior European Economist and Strategist de Schroders
Se suponía que la economía del Reino Unido se sumiría en la recesión poco después de la votación para abandonar la UE, pero la mayoría de los pronósticos estaban equivocados.
La confianza del consumidor se mantuvo positiva, alentando un mayor gasto, a pesar de una desaceleración en casi todos los demás sectores de la economía. Como el consumo de los hogares es un gran contribuyente al crecimiento del PIB, compensó la debilidad en otros ámbitos, dando una imagen de éxito para aquellos que respaldan el Brexit.
Sin embargo, el crecimiento del consumo con su tasa más alta desde 2005 fue totalmente insostenible. Cuando la libra se desplomó después de la votación, el costo de las importaciones aumentó para los fabricantes y los minoristas. Esto no disuadió a los compradores al principio; de hecho, los hogares redujeron su tasa de ahorro a niveles bajos para financiar el derroche posterior al Brexit.
Cómo ha afectado la inflación al gasto familiar y a las empresas
Finalmente, la inflación se puso al día y los hogares se vieron obligados a recortar gastos, causando que la economía se desacelerase bruscamente en 2017. El Reino Unido pasó de ser la economía de mayor crecimiento del G7 a la de crecimiento más débil.
Las empresas habían comenzado a posponer y recortar proyectos de inversión desde 2015, mucho antes de que se conociera el resultado del referéndum. Desde entonces, la inversión empresarial ha caído aún más, solo para recuperarse un poco en los últimos meses. Creció solo un 2,4% en 2017, la mitad de la tasa promediada entre 2011 y 2015. Además, el aumento inicial de la inversión extranjera directa (IED) después de la caída de la libra ha terminado. Hubo una disminución del 82% en la entrada de IED en el cuarto trimestre de 2017 en comparación con el cuarto trimestre de 2016. En cambio, el pesimismo se ha afianzado con una planificación centrada en el peor resultado posible. Algunas empresas incluso han comenzado a reubicar personal, por temor a sufrir restricciones en su capacidad para hacer negocios.
De cara al futuro, es probable que el crecimiento económico del Reino Unido sea lento, en torno al 1,4% en 2018. Con una inflación prevista en tormo al 2,6%, el Reino Unido se sentirá como un entorno estanfilacionista durante algún tiempo. En cuanto a 2019, las perspectivas son muy inciertas. Suponemos que se acordará un período de transición que preserve el status quo del mercado único y la pertenencia a la unión aduanera, pero es poco probable que esto ayude a que el crecimiento se recupere mucho.
¿Cuándo subirá los tipos de interés el Banco de Inglaterra?
Mientras tanto, el Banco de Inglaterra (BoE) está monitorizando de cerca los eventos Brexit y la reacción en la economía. Después de descartar un alza de tipos en mayo, el consenso se ha desplazado drásticamente de un aumento en el corto plazo, a uno posiblemente para el final del año (63% de probabilidad con un precio de mercado).
El próximo BoE Inflation Report aparecerá en agosto, lo que le brinda al Banco otra oportunidad de considerar su postura política, pero dada la debilidad reciente tanto en el Reino Unido como en el extranjero, es probable que la tasa del banco permanezca en espera.
Prevemos que el BoE aumentará una vez más en 2018 (noviembre) y dos veces más en 2019 después de la fecha límite del Brexit del 29 de marzo.