Santiago Satrústegui (EFPA): “El asesor no es un gurú; es un gestor de las emociones del cliente”
EFPA España trabajará para que la profesión de asesor financiero se convierta en un pilar fundamental para el mejor desarrollo financiero del país, siguiendo los principios de profesionalidad y ética. Ese es el gran objetivo que se marca la asociación dentro de su plan estratégico 2019-2021 que presentó el nuevo presidente de la asociación, Santiago Satrústegui, en sustitución de Carlos Tusquets, que ha estado durante los últimos 16 años al frente de la organización, tiempo en el que EFPA se ha situado como la primera asociación de Europa en el sector financiero.
Superar los 40.000 asociados
El nuevo presidente de EFPA anunció que la asociación ya ha alcanzado los 32.000 miembros certificados, lo que supone un crecimiento del 20% desde la entrada en vigor de MiFID II, y que está celebrando una media de 8.000 exámenes individuales al año. Satrústegui prevé que el crecimiento continúe con fuerza en la asociación, superando los 40.000 asociados a finales del año que viene.
Además, EFPA España cuenta ya con más de 70 entidades colaboradoras, incluidas las principales entidades nacionales e internacionales, a lo que se suman 21 centros acreditados con programas formativos para los exámenes EFA y los cuatro centros acreditados para impartir el curso preparatorio para la certificación EFP.
«EFPA trabajará para que la profesión de asesor
financiero se convierta en pilar fundamental
del desarrollo financiero del país»
También quiere fomentar la ampliación de servicios a los asociados, simplificando al máximo el acceso a cursos online y con más oferta de formación; y la cartera de entidades colaboradoras, así como incrementar su capilaridad en todo el territorio español, abriendo delegaciones en aquellas regiones donde todavía no tiene una estructura estable, como Castilla y León, Castilla La Mancha, La Rioja o Extremadura.
Para Satrústegui, “queremos atender las necesidades del asesor, independientemente de dónde trabaje: En un banco, una ESI, una EAF, una gestora o una aseguradora”.
MiFID II cambia el modelo de asesoramiento
Satrústegui añadió que “la aplicación de MiFID II nos dio la razón ya que en EFPA España llevamos trabajando desde los inicios para reivindicar la exigencia en la formación, los mayores estándares de calidad y la formación continua para asegurar el mejor servicio al cliente”.
Según sus palabras, “EFPA comenzó su labor cuando todavía no era una exigencia regulatoria. Lo hicimos por pura convicción en la necesidad de la formación en el sector y nuestros asociados venían porque querían tener un marchamo de calidad para desarrollar su actividad profesional”.
En este sentido, el nuevo presidente de EFPA España destacó la plena adaptación de toda la industria al nuevo escenario normativo. “Una encuesta reciente que hicimos entre nuestros asociados refleja que el 86% de los profesionales cree que las modificaciones normativas recientes, derivadas de la puesta en marcha de MiFID II, han supuesto un verdadero cambio en el modelo de asesoramiento financiero en España, aunque solo una cuarta parte considera que ese cambio ha sido radical”.
Gestión de las emociones
Añadió que “la profesión de asesor financiero estaba muy poco definida. MiFID II nos ha ayudado a entender en qué consiste la actividad de asesoramiento, que es la gestión de las emociones del propio asesor y de su cliente. El asesor no es un gurú que tenga que adivinar cómo van a evolucionar los mercados, la clave de su trabajo está en la alineación con los objetivos de sus clientes. Aquí es importante el conocimiento que nos aportan nuestros asociados de sus conversaciones con los clientes. Si nuestros asociados hablan normalmente con 50 clientes –un cálculo conservador- eso indica que 1,5 millones de españoles nos están aportando su visión de la industria financiera”.
Otro aspecto que ponderó en su actividad son “los principios éticos. Todos nuestros asociados tienen que firmar, tanto en la certificación como en el recertificación cada año, el Código Ético de EFPA. Además, contamos con un Comité de ética que elabora recomendaciones y que cada vez empieza a tener una parte más pública».
Ley de Contrato Hipotecario
Respecto a la reciente aprobación de la Ley de Contrato Hipotecario, que exige una certificación a todos los profesionales involucrados en esta actividad, Satrústegui explicó el esfuerzo que está haciendo EFPA para certificar con rapidez a sus asociados en las nuevas exigencias normativas: “Calculamos que unos 25.000 de nuestros asociados están involucrados, con más o menos intensidad, en el mercado hipotecario, y les estamos facilitando la formación a través de un acuerdo con una entidad externa para que puedan recibir pronto la certificación sin un aumento de la cuota a EFPA”.