María Muñoz: «El inversor español se ha vuelto más desconfiado y toda relación financiera se basa en la confianza»
En una entrevista realizada para la iniciativa #Twecos de Crédito y Caución, María Muñoz, asesora financiera en Andbank España y una de las voces autorizadas sobre el sector financiero con más seguridores en la redes sociales (su cuenta de twitter tiene más de 34.000 seguidores) ha comentado cómo ha evolucionado el inversor español tras los duros años de la cirsis financiera. Para empezar, aclara que, a su juicio, «el español medio no es inversor, es ahorrador. Basta con ver los datos de los depósitos que aún quedan y que se están pagando al cero por ciento, porque es el precio al que está el dinero».
Además, afirma que los clientes «son ahora más reacios o prudentes, y tienden a buscar una segunda opinión«. Una circunstancia que considera positiva «en un primer impulso, pero a lo mejor también es negativa, porque dudan de todo. Y entonces no saben distinguir entre quién les está asesorando bien y quién no. Hay que tener en cuenta que, en el tema de las inversiones y el ahorro, cualquier relación con una entidad financiera se basa en la confianza. Y ser precavido muchas veces significa ser desconfiado. Pero si la precaución viene acompañada de confianza y ánimo de aprender, entonces es buena.
Escasa cultura financiera
Cree que, a pesar de todo lo ocurrido, «la cultura financiera del inversor o ahorrador español no ha aumentado. Lo que sí hay es más desconfianza, que se traduce en precaución, pero no en mayor cultura financiera. Algo que yo defiendo mucho en las redes sociales y en los medios de comunicación es que el cliente de banca y de productos financieros se involucre en sus ahorros e inversiones y tenga conocimientos, aunque sean básicos, de lo que se hace con su dinero y dónde se invierte».
En su caso, señala que, al asesorar a un cliente, «hay que jugar con el máximo conocimiento del cliente y dejar claro que toda relación financiera de inversión o ahorro se basa en la confianza. A partir de ese momento, un cliente no te valorará tanto por el mayor o menor dinero que le has hecho ganar o perder, sino por la confianza que ha tenido contigo.
Su mensaje para los inversores más principiantes es, primero, empiecen a ahorrar y, cuando alcancen cierta cantidad, «empiecen a invertir según el grado de riesgo y horizonte temporal de cada uno. Siempre tienes que arriesgar la parte de la que puedas prescindir, jugarte aquello que puedas perder. Y en lo que no puedas perder, debes ser más conservador«.