Magallanes encuentra oportunidades de inversión en medio de la inestabilidad
En su carta a los inversores sobre el primer semestre del año, Iván Martín, director de inversiones de Magallanes Value Investors, ha puesto de manifiesto la inestabilidad provocada por los acontecimientos de carácter macroeconómico y geopolítico que han marcado el devenir de los mercados, con una notable disparidad entre las bolsas de Europa y Estados Unidos. Sin embargo, Martín señala que ha sido esta inestabilidad la que «nos ha permitido encontrar oportunidades de inversión«, de manera que han incrementado su exposición en bolsa en su fondo europeo Magallanes European Equity.
La volatilidad reinante en la primera mitad del año obedece al «recrudecimiento de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China por el anuncio de aranceles, por un lado, y la debilidad de las divisas de ciertos países emergentes, por otro lado». Esta situación se ha traducido de forma muy dispar en los mercados de renta variable: «el comportamiento de las principales bolsas en el primer semestre del año ha sido mixto, con caídas generalizadas en Europa mientras que el S&P 500 americano experimentaba subidas próximas al +5%. Mención aparte merece la negativa evolución de los índices bursátiles de algunos de los principales países emergentes. El Merval de la Bolsa Argentina perdía más del -40% y Brasil cerca del -16%, por su lado en Europa, la Bolsa de Estambul se dejaba casi el -30% de su valor y Varsovia un -16%, todas las rentabilidades en euros.
Para Martín, la geopolítica global afecta especialmente a aquellos sectores y países más dependientes del comercio global. Esto explica la
diferencia de rentabilidades entre los fondos gestionados por Magallanes. Así, los resulados durante la primera mitad de 2018 y, por tanto, acumuladas en el año han sido del +6,5% para el fondo Iberian, -3,2% para el European y -5,4% para el Microcaps.
Por otra parte, el director de Inversiones de Magallanes ha advertido de que, «aunque de los errores se aprende, a veces perdemos el foco en lo verdaderamente importante, que no es otra cosa más que aprender cuando hacemos lo correcto, con el objetivo de poder repetirlo. En ocasiones, el exceso de autocrítica y la obsesión enfermiza por no repetir los errores del pasado, puede llegar a tener consecuencias nefastas, como la falta de convicción, o lo que es peor, la indexación por temor a la pérdida de reputación. Las mejores inversiones, con frecuencia, suelen ser las menos obvias en el preciso instante que aparecen. Se produce una asincronía entre el origen de la idea y el desenlace de la misma, entre percepción de valor y valor real. La pregunta que me hiceron recientemente unos estudiantes sobre inversiones exitosas me hizo reflexionar sobre el concepto de asincronía en la gestión de inversiones: a la hora de invertir, la diferencia entre percepción negativa de valor y valor real a largo plazo, se ha repetido de forma recurrente en la práctica totalidad de inversiones llevadas a cabo con éxito».