«La sostenibilidad para BNP Paribas AM implica un diálogo abierto y fluido con las empresas»
Con más de veinte años de carrera a sus espaldas, Sol Hurtado de Mendoza, directora general de BNP Paribas Asset Management para Iberia, ha sido testigo del espectacular avance que la sostenibilidad y los criterios ASG de inversión responsable (término que integra los factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo en el proceso de selección de valores de una cartera) han tenido dentro de la industria financiera. Una filosofía que incorpora elementos éticos a los tradicionales de análisis, y que esta firma francesa, donde Hurtado de Mendoza comenzó su andadura profesional en 2001, ha tomado como eje principal de su estrategia para los próximos años.
A continuación, se reproduce la primera parte de una entrevista que ha mantenido con elAsesorFinanciero.com, y cuya continuación se publicará la próxima semana.
Pregunta. ¿Cómo ve la actual situación de los mercados? ¿Estamos en un final del ciclo donde tenemos que estar preparados para vivir bajo el prisma de la volatilidad?
Respuesta. En BNP Paribas AM creemos que vamos a estar durante un tiempo en un contexto de mayor volatilidad. En realidad, estamos en un momento muy interesante porque somos testigos de un periodo de revolución en muchos temas, como la tecnología, la digitalización, el crecimiento exponencial de la población o el envejecimiento, por citar sólo algunos ejemplos. Todo ello hace que se planteen una serie de retos a medio y largo plazo, que presentan oportunidades muy buenas de inversión, y que se reflejan en algunos de nuestros productos como el Parvest Disruptive Technology, el Parvest Aqua o el Parvest Climate Impact, que están pensados para dar solución a los problemas que existen en la actualidad.
En cuanto al mercado y ya desde un punto de vista macroeconómico, el crecimiento sigue estando ahí, es sostenido y estable, sin ser especialmente relevante. La economía de Estados Unidos sigue dando buenas cifras, los resultados empresariales continúan siendo positivos, algunos incluso mejor de lo esperados. Hay países como el propio gigante norteamericano o Inglaterra con magníficos datos de empleo, y, además, estamos en un contexto donde hay muy poca inflación, lo que ha permitido a los bancos centrales poder frenar el ritmo de la Fed.
P. ¿Cuáles son los riesgos más relevantes para estos próximos meses?
R. Los mayores riesgos bajo nuestro criterio son la guerra comercial entre EEUU y China, junto al Brexit, que pueden traer más volatilidad a los mercados. La batalla comercial entre Beijing y Washington en realidad es algo que va más allá, ya que lo que se está intentando dirimir es que país va a liderar la innovación tecnológica en el futuro. Creo que también se trata de un conflicto relacionado con la ciberseguridad y las patentes. China es, cada vez más, una economía que se está volcando en servicios, y que, a pesar de los problemas que puede tener, sigue creciendo a ritmos del 6% y se han implementado medidas que han fortalecido el estímulo fiscal. En general, desde BNP Paribas AM somos prudentemente optimistas, y estamos en esta coyuntura provechando las oportunidades que surgen en los mercados incrementado algunas posiciones en activos de riesgo gracias a, por ejemplo, las ligeras bajadas que vivimos en mayo.
P. BNP Paribas AM lleva desde 2002 realizando una apuesta muy sólida en sostenibilidad. ¿Cuáles son los retos que se han marcado y qué les queda por hacer?
R. Nuestra entidad lleva alrededor de veinte años apostando muy claramente por la sostenibilidad. El pasado mes de marzo anunciamos nuestra estrategia global de sostenibilidad, que significa que en enero de 2020 todos nuestros fondos van a aplicar criterios ambientales, sociales y de buen gobierno. De los en torno a 400.000 millones de activos bajo gestión directa más de la mitad, 222.000 millones ya están aplicando a día de hoy criterios ASG. Además, hay 37.000 millones que son fondos puros de inversión socialmente responsable, donde además de elementos ASG aplicamos criterios best in class, analizando junto a los resultados financieros parámetros extra financieros, que para mí son clave y que creo que es el reto más grande que tiene para los próximos años la sostenibilidad. No basta en la actualidad con que una entidad diga que es verde y sostenible, sino que lo tiene que cimentar con datos. Dentro de nuestro grupo, esta filosofía ha ido calando cada vez con el paso del tiempo en toda la organización. El proyecto, que ya comienza a ser una realidad, es que en el nuevo plan de sostenibilidad los criterios ASG estén en todo: en cualquier producto nuevo que se lance, en todos los equipos de inversión, en toda la estrategia. Absolutamente todo va a estar enfocado en temas de sostenibilidad.
P. ¿Cuál es el perfil de profesionales que trabajan en sostenibilidad en BNP Paribas AM?
R. Nuestro equipo de sostenibilidad está formado por 25 personas, aunque en los últimos 18 meses hemos contratado a 14. Todos ellos son especialistas muy reconocidos y con mucho prestigio en distintos sectores, y están liderados por Jane Ambachtsheer, que era responsable en Mercer y es miembro del Consejo de Estabilidad Financiera (TCFD, por sus siglas en inglés); junto a Mark Lewis, que es el jefe global de Investigación de Sostenibilidad y también miembro del TCFD. Ambos son punteros a nivel internacional en todo lo que tiene que ver con criterios ASG.
Equipo de BNP Paribas AM Iberia
P. ¿Cómo es el proceso de selección global en sostenibilidad?
R. Nuestro proceso de selección global en temas de sostenibilidad comienza aplicando el Pacto Global de las Naciones Unidas, y que son diez principios que cubren derechos humanos, derechos laborales o temas de anticorrupción, entre muchos otros. Aquellas empresas que incumplan de forma reiterada cualquiera de estos principios quedan excluidas de nuestra cartera. Luego las analizamos en base a nuestras políticas sectoriales, que implica primero a aquellos sectores controvertidos en los que no queremos invertir o en los que sólo invertimos si hay empresas que cumplen una serie de criterios. El armamento está excluido, el tabaco también, así como el carbón, el aceite de palma o la materia prima agrícola para evitar especulación.
Lo siguiente serían los productos SRI, aplicando criterios sociales, ambientales y de buen gobierno. En este punto, nuestro equipo de sostenibilidad hace estudios sectoriales donde se establecen distintas ponderaciones para cada uno de estos criterios. Para cualquier sector, el buen gobierno pesa mínimo un 30%, un 20% al menos lo social y un 10% el medioambiente. En general, parece que se oye más hablar acerca de los temas de medio ambiente cuando lo que es crucial es el buen gobierno de las empresas, aunque es cierto que hay sectores donde el medio ambiente va a pesar mucho más, como el petróleo o el gas, mientras que en otros, como el financiero, damos mucho más valor al buen gobierno.
Después de estos análisis hacemos un ranking por deciles, y todas aquellas entidades que quedan en los tres últimos deciles resultan excluidas de cualquier proceso de inversión en los best in class. Lo que consideramos crucial dentro de la política de sostenibilidad ya no es solo excluir, que es como quizá comenzaron a aplicarse las políticas de sostenibilidad en su inicio, sino que para nosotros en vital establecer un diálogo abierto y fluido con las empresas para que vayan en la dirección que nosotros queremos y transmitirles nuestra visión y recomendaciones de mejora en los criterios de sostenibilidad, como, por ejemplo, tener consejeros mejor preparados, políticas de igualdad y de formación a los empleados, cómo se orquesta la conciliación con la vida familiar, disponer de especialistas en cambio climático o contar con mayor independencia en el gobierno corporativo. Se trata de una conversación constante que intentamos mantener con todas las entidades.
P. ¿Cómo se articula ese diálogo para que resulte útil en su toma de decisiones?
R. Aunque hay empresas con las que tras existir controversia terminan siendo excluidas de nuestro portfolio, nuestro objetivo es llegar a un acuerdo con ellas sobre los puntos a mejorar y colaborar en calendarizar cuándo se implementarán los cambios. En el fondo, lo que queremos es crear el futuro, no tomar lo que nos viene ya dado. En BNP Paribas AM hemos fortalecido mucho el equipo de sostenibilidad en todo lo que tiene que ver con stewardship (gestión responsable) que incluye desde mantener un dialogo responsable con las empresas hasta tener líneas de comunicación abiertas con las autoridades, con los legisladores, con lobbies y, en general, con todos los stakeholders que resulten eficaces para ver dónde estamos y hacia dónde queremos ir.
Ejes de la inversión sostenible en BNP Paribas AM (Fuente: Global Sustainability Strategy BNP Paribas Asset Management)