La CNMV sigue dudando como trasponer MiFID II en temas de incentivos y formación
La intervención de José María Marcos, director general de la CNMV, en el EFPA Congress 2016 no aclaró aspectos importantes de la transposición de MiFID II, especialmente los referidos a incentivos y a la formación obligatoria de los asesores, aunque resaltó la intención de la Comisión de debatir con el sector estos aspectos antes de tomar decisiones.
Según Marcos, “es cierto que una parte del impacto de la nueva norma dependerá de cómo se transponga a nuestro ordenamiento. El tema de los incentivos es el que más preocupación y debate genera en el sector. Aquí hay que destacar que el asesoramiento que hoy se presta es poco independiente por los productos vinculados que se ofrecen a los clientes”.
Reconoció que existe un vivo debate sobre cómo se regulará poder cobrar incentivos “si se aumenta la calidad del servicio al cliente, por ejemplo, facilitando productos de terceros o herramientas de información que ayuden al cliente”.
Regular la certificación
Un segundo aspecto importante en el que la CNMV no se ha decidido aún es la regulación definitiva de la formación de los asesores y sus certificaciones. Marcos señaló que “todavía no hemos decidido si se regulará una lista de certificaciones reconocidas para el sector o si se publicarán los criterios que deben tener las calificaciones de los asesores. Es un debate en el que contaremos con la opinión del sector”.
Un tercer aspecto que citó de la transposición es el de gobierno de productos, “donde claramente hemos tomado una posición preventiva, ante lo que hemos visto durante la crisis. Las entidades deben tener procedimientos para diseñar productos adecuados para sus clientes y medidas razonables para que se distribuyan al público objetivo para el que fueron diseñados”.
Y concluyó que “MiFID II lo que persigue es el aumento protección del inversor y mecanismos preventivos para proteger al cliente. La consecución de este objetivo necesitará de la integración en la cultura corporativa de las entidades de la idea de la justicia con el cliente”.
Independencia del certificador
Por su parte, Santiago Satrústegui, vicepresidente de EFPA España, puso en valor “los 16 años que en EFPA llevamos formando y certificando a los asesores españoles. Consideramos fundamental que la certificación sea independiente de la entidad que se ocupa de la formación, que el que certifique no sea el que forme”.
Sobre este tema de la formación de las redes, Abraham Carpintero, socio de PwC, indicó que “a las entidades les da igual uno u otro modelo que elija la CNMV, pero lo que quieren es concreción en la normativa aplicable”.
Y Francisco Uría, socio principal de KPMG Abogados, destacó que “hay muchos nervios en el mercado y debería haber claridad en la norma en un plazo razonable. En general, simpatizo con las certificaciones externas, pero también habrá que tener en cuenta la situación de muchos profesionales no certificados que tienen experiencia de muchos años”.