Jupiter AM: China es una dicotomía de riesgo y oportunidad para los inversores
Por Charlie Sunnucks, gestor de fondos del equipo de Mercados Emergentes en Jupiter AM
Los últimos 25 años han supuesto una auténtica transformación para China. El país ha pasado de funcionar como la ‘fábrica del mundo’ a ser un impulsor clave del crecimiento global y tener una importante influencia en el ámbito geopolítico. La transición no ha sido un ascenso directo, ni libre de problemas, pero ha sacado a millones de personas de la pobreza y ha ayudado a una serie de empresas chinas a convertirse en líderes mundiales, y este desarrollo ha creado una creciente fricción. Desde los servicios 5G en Europa hasta el comercio electrónico en el sudeste asiático, las empresas chinas ya no son observadoras ociosas de las oportunidades globales, sino que, de forma activa, buscan desarrollarse y competir en el extranjero.
Tras un período de crecimiento anormalmente alto para una economía, los responsables políticos chinos buscan cada vez más el equilibrio. Son conscientes de que el progreso económico ha generado desafíos ambientales, de que el éxito también ha creado desigualdad y de que la considerable inversión ha traído un aumento de la deuda. Los próximos 25 años requerirán una formulación de políticas más matizada, lo que conllevará reducir algunos de los excesos que el progreso ha traído consigo. En los últimos años, los responsables de la formulación de políticas ya han persistido en la reforma del lado de la oferta: han comenzado a gestionar de manera más proactiva los riesgos del mercado de capitales y han desarrollado controles ambientales.
De cara al futuro, China es una dicotomía de riesgo y oportunidad para los inversores. Existen desafíos para la segunda economía más grande del mundo, pero también, en una visión a largo plazo, siguen existiendo oportunidades estructurales positivas. Entre ellas se encuentran el aumento de la inclusión financiera, la penetración de la atención sanitaria, el desarrollo de las infraestructuras, el consumo y la innovación tecnológica en constante crecimiento. Por lo tanto, los inversores deberían centrarse en las empresas que están en condiciones de beneficiarse de un cambio fundamental positivo, en lugar de seleccionar empresas cíclicas que no estén dispuestas a cambiar. Como dice el refrán chino: «Cuando soplan los vientos del cambio, algunos construyen muros y otros, molinos de viento».