Estos son los 10 primeros fondos de pensiones en el mundo
Según el último estudio de Willis Towers Watson, el ranking mundial de los mayores fondos de pensiones está encabezado por Government Pension Investment (Japón) con un patrimonio gestionado de 1,163 billones de dólares; en segunda posición se sitúa Government Pension Fund (Noruega), con 865.943 millones de dólares; le siguen Federal Retirement Thrift (Estados Unidos), con 443.328 millones; National Pension (Corea del Sur), con 435.405 millones, y ABP (Holanda), con 384.271 millones. Completan el top ten National Social Security (China), California Public Employees (Estados Unidos), Central Provident Fund (Singapur), Canada Pension (Canadá) y PFZW (Holanda).
El informe P&I/Willis Towers Watson Global 300 refleja la caída del 3% que ha experimentado el patrimonio de los 300 mayores fondos de pensiones en 2015, que se ha situado en 14,8 billones de dólares. No obstante, destaca que, desde el comienzo de la crisis financiera mundial, el crecimiento acumulado ha sido del 19%. En conjunto, estos 300 grandes representan cerca del 42% del patrimonio global.
Atendiendo a la distribución geográfica, Norteamérica sigue teniendo un gran peso, especialmente Estados Unidos: concentra casi cuatro de cada diez euros gestionados, representando aproximadamente el 38% del mercado. Japón ocupa la segunda posición, con un 12%; Holanda es tercera con una cuota mercado del 6%, mientras que Noruega y Reino Unido se sitúan en cuarta y quinta posición respectivamente, con cerca del 6% y 5% respectivamente. Por tamaño, Estados Unidos también es el país que cuenta con los mayores fondos de pensiones del mundo.
David Cienfuegos, director de Inversiones de Willis Towers Watson España, señala que “las continuas fluctuaciones del valor de los activos junto con el aumento de las obligaciones explican lo complicado que se ha convertido para los fondos alcanzar sus objetivos. Los grandes inversores pueden encontrar ciertas ventajas en un entorno de inversión volátil, complejo y ambiguo mediante el incremento de la efectividad organizacional para la mejora en la toma de decisiones. Un adecuado nivel de gobierno en materia de inversiones es el determinante clave para obtener esa ventaja competitiva necesaria para optimizar las carteras y tener éxito en la consecución de objetivos».
Cienfuegos apunta también que “durante los últimos cinco años ha habido mucho movimiento en el ranking, los primeros puestos vienen determinados principalmente por carteras altamente diversificadas que obtienen una buena rentabilidad en momentos de estrés de mercado y que tienen un enfoque hacia el rendimiento total en lugar de retornos relativos. Otro elemento diferenciador de los fondos líderes es su capacidad para innovar o ser pionero; algo crítico en un entorno de bajo crecimiento. Uno de los aspectos donde los inversores han aprovechado esto en su beneficio es en la búsqueda de innovación a través de betas alternativas (exposiciones a mercado no tradicionales), combinado con un enfoque apropiado para capturar alpha. Este nuevo pensamiento se está canalizando en cómo reunir capital intelectual interno y externo de forma rentable. Esto ha sido recibido por la industria como forma de mejorar la gestión activa y el control de costes».
El peso de los fondos soberanos
Los fondos de pensiones soberanos continúan teniendo un peso preponderante en el ranking con 27 fondos que representan el 28% del patrimonio, alrededor de 4,2 billones de dólares. De hecho, tres fondos soberanos se sitúan entre las cinco primeras posiciones del ranking general. Los 115 fondos públicos presentes en el estudio alcanzan casi los 6 billones de dólares en 2015, representando el 39% del total. Los fondos individuales (58) y los de empleo (100) suman el 14% y el 19% respectivamente sobre el total del patrimonio del estudio.
“El panorama de inversión está cambiando rápidamente a medida que los inversores incrementan su nivel de gobierno para ser más eficientes en sus procesos y prácticas de inversión. Hace 20 años los grandes inversores ejecutaban sus inversiones principalmente a través de terceros”, señala David Cienfuegos. “A día de hoy observamos mayores capacidades entre los inversores con mayor patrimonio, y la mejor práctica de inversión se asocia, generalmente, con conseguir un buen equilibrio entre los recursos internos y externos. Este fortalecimiento de los recursos está permitiendo a estos fondos ampliar sus ámbitos de responsabilidad, ya sea en cuestiones de Responsabilidad Social (ambientales, sociales y de gobierno), sus propias responsabilidades y oportunidades como inversores o en algunos fondos, su impacto en favor de la sociedad. Esta tendencia a reconocer la importancia de los recursos en la inversión institucional es probable que se acelere y se convierta en una oportunidad de diferenciación».