Coininvest detecta nuevos perfiles de inversores en metales preciosos: mujeres y jóvenes
Coininvest, un portal online especializado en compraventa de metales preciosos como plata, oro, platino y paladio, perteneciente al grupo estadounidense StoneX, detecta que ha cambiado el perfil del inversor en estos activos, con un creciente protagonismo de los jóvenes y sobre todo de las mujeres.
Cada vez hay gente más joven que empieza a invertir mediante cantidades pequeñas y de forma periódica en metales preciosos, que suelen ser una inversión a largo plazo. “Son algo que se compra, habitualmente, para guardar”, explican en Coinvest.
Este demuestra que los jóvenes son capaces de hacer inversiones a largo plazo. Al mismo tiempo, también refleja un cierto componente de ahorro precaución, ya que los metales preciosos suelen ser activos tradicionalmente considerados seguros.
Raquel Herrero, analista de metales preciosos de la plataforma, apunta que el oro, pero también otros metales preciosos, están siendo claros activos refugio en este tiempo convulso de inflación y de guerra provocada por la invasión de Ucrania por Rusia.
En ese sentido, los metales preciosos son utilizados como protección del capital. Obviamente el oro es el activo refugio por excelencia en momentos de crisis y de incertidumbre, pero también son importantes la plata, el paladio y el platino.
Tradicionalmente, los hombres han sido los que más han invertido en metales preciosos, pero Coinvest detecta un claro cambio de perfil. Raquel Herrero subraya que el perfil del inversor en metales preciosos no solamente está haciendo más joven, sino que además el componente femenino es mucho más protagonista.
Ese cambio de perfil comienza en 2020, con la irrupción de la pandemia de coronavirus. El Covid-19 provoca los inversores se interesen más por los metales preciosos. Sobre todo, las mujeres.
“Desde 2020, a raíz del terremoto financiero que provocó el Covid-19, el número de clientes que invierte en metales preciosos físicos ha aumentado, y aunque el sesgo sigue siendo masculino, se aprecia que hay más mujeres que antes”, subraya la analista de Coinvest.
Según esta experta, ese mayor protagonismo femenino tiene mucho que ver con el hecho de poder hacer una compra online, de una manera más aséptica.
Junto a la mayor presencia de mujeres, en Coinvest registran que cada vez hay gente más joven que empieza a invertir en metales preciosos con cantidades pequeñas, pero que lo hace periódicamente.
“Tenemos a quien parece haber movido parte de su capital desde activos más volátiles para realizar una inversión en metales físicos por un capital muy importante, hasta quien se aventura a comprar sus primeras onzas de plata para tantear el mercado”, señala Raquel Herrero.
Creciente Demanda para usos industriales
La analista de metales preciosos de la plataforma explica el precio de los metales preciosos no se genera únicamente en base a la proporción de metal que se destina a inversión pura, que en realidad es bastante pequeña comparada con los otros usos como joyería o industria.
La plata es un producto muy demandado para placas solares y componentes de automoción, entre otras utilidades. Eso explica su elevado precio. La demanda de metales preciosos para usos industriales, unida a la coyuntura geopolítica y económica y a los problemas en las cadenas de suministro, influyen en la cotización y, por tanto, en la rentabilidad de la inversión.
En Coinvest no rehúyen la comparación entre los metales preciosos y los criptoactivos. Pero dejan muy claro que bitcoin y todas las demás criptomonedas no son tangibles, están deslocalizadas, muy poco reguladas y sufren una impresionante volatilidad.
Los metales preciosos se pueden tocar, son tradicionalmente más seguros, se compran para toda la vida o al menos no desde luego con interés especulativo a corto plazo. Suelen ser una inversión a largo plazo, comprando piezas que se guardarán durante años, con la idea incluso de dejarlas a los hijos o a los nietos.
Desde este planteamiento, las fluctuaciones en el precio de los metales preciosos no son tan importantes, porque se trata de una inversión en activos con los que la rentabilidad suele incrementarse a medida que pasa el tiempo.