Capital Group: ¿la renta fija core podría convertirse en la estrella de las carteras?
Por Pramod Atluri, gestor de renta fija en Capital Group
Las oportunidades de generación de rentas y la potencial ralentización de la economía podrían convertir a la renta fija core en la estrella de una cartera de inversión bien diversificada. Estos días no se pueden leer las noticias sin tropezarse con la palabra «recesión». Aunque la ralentización del crecimiento puede suponer un problema para muchas clases de activo, para la renta fija core es el nirvana. La ralentización del crecimiento, la reducción de la inflación, el aumento de los rendimientos y el próximo fin del ciclo de subidas de tipos de interés por parte de la Reserva Federal ofrecen una oportunidad fantástica para que los fondos de renta fija core generen una rentabilidad total en torno al 5% y vuelvan a ofrecer equilibrio a las carteras de inversión. En la actualidad, el rendimiento inicial de un fondo de renta fija core se sitúa en torno al 4,5%, lo que supone un buen indicador de las expectativas de rentabilidad a largo plazo. Como gestor activo, trato de aumentar la rentabilidad sobre el índice gestionando la sensibilidad a los tipos de interés, la asignación sectorial, la selección de títulos y otros mecanismos, lo que podría impulsar la rentabilidad esperada hasta el 5% o el 6%, con menos volatilidad que la renta variable. Y esta rentabilidad podría ser aún mayor si la recesión acaba produciéndose y la inflación se reduce con más rapidez de lo esperado. Lo más probable es que los tipos de interés cayeran, lo que llevaría a una importante revalorización del precio de los bonos. Por ejemplo, un recorte de tipos de 50 puntos básicos se traduce en una ganancia aproximada del 3%, lo que sitúa el potencial de rentabilidad total para los bonos core de gestión activa entre el 8% y el 9% en ese escenario.
Históricamente, las rentas han dominado la rentabilidad total a largo plazo