Capital Group: La inversión defensiva reparte dividendos en mercados bajistas
Joyce Gordon es gestora de renta variable de Capital Group y en esta entrevista nos ofrece su perspectiva sobre el entorno actual y nos habla sobre las lecciones que han aprendido en su trayectoria de inversión en periodos de volatilidad.
– La economía estadounidense se encuentra en las últimas fases del ciclo económico. ¿Cuál es su posicionamiento actual? ¿Ha cambiado algo?
A pesar de encontrarse efectivamente en las últimas fases del ciclo económico, ahora que la Reserva Federal ha interrumpido su proceso de subidas de tipos de interés, creo que la expansión de la economía estadounidense, que se prolonga ya durante diez años, podría continuar. También pienso que los mercados pueden seguir subiendo.
Pero es cierto que los mercados de renta variable tienden a mostrarse más volátiles durante las fases más avanzadas del ciclo económico. En parte, ello se debe a que el volumen de los pedidos comienza a disminuir, o al menos a estabilizarse, lo que aumenta la posibilidad de que las compañías no cumplan sus previsiones de ganancias. Por tanto, creo que los mercados van a mostrarse volátiles en el futuro.
En un entorno así, trato de ser más defensiva, y busco compañías consolidadas con una sólida trayectoria de generación de rentas independientemente de lo que esté pasando en la economía.
– ¿En qué tipo de compañías encuentra actualmente esas características?
Las compañías del sector de las eléctricas y el gas con contratos a largo plazo y una tarifa base estable suelen resistir relativamente bien en momentos de dificultad. También me fijo en compañías estadounidenses del sector de defensa, compañías del sector sanitario y empresas de alimentación, muchas de las cuales han conseguido superar al mercado en periodos anteriores de caída.
Este tipo de compañías tienden a presentar niveles reducidos de deuda; en ocasiones presentan una posición positiva de tesorería neta. Y muchas de ellas reparten dividendos. No busco únicamente una elevada rentabilidad por dividendo; cuanto más se prolongue el actual periodo de expansión, más me fijo en la sostenibilidad de los dividendos. Quiero asegurarme de que una compañía va a poder pagar sus dividendos a lo largo del ciclo económico. Si una compañía decide recortar sus dividendos, cae el respaldo del mercado al precio de la acción. Eso fue lo que ocurrió con muchas compañías durante la Gran Recesión de 2008 y 2009.
– ¿Qué enseñanzas ha podido extraer de la recesión de 2008, o de otras caídas que haya registrado el mercado a lo largo de su trayectoria profesional?
He aprendido una lección importante, y es que es mejor evitar aquellas compañías que presentan un nivel excesivo de deuda, ya que han de enfrentarse a numerosos problemas. Por ejemplo, es posible que las agencias de calificación crediticia las insten a recortar sus dividendos para que puedan mantener su calificación de grado de inversión en la emisión de deuda.
Otra de las lecciones que he aprendido es que es importante prestar mucha atención a lo que hacen los equipos directivos. Pensemos en Washington Mutual, que quebró durante la crisis financiera de 2008. En los inicios de la crisis, la entidad presentó una propuesta que modificaba la estructura de bonificación de sus directivos, eliminando el impacto de las pérdidas por préstamos. En otras palabras: se incentivaba a los directivos por volumen, no por calidad. Ahora vemos que no era más que un indicio de que algo horrible estaba por llegar.
No veo que actualmente nos enfrentemos a ese tipo de cosas. Pero algunas compañías están emitiendo deuda para recomprar acciones y pagar sus dividendos, en lugar de utilizar el flujo de caja libre. Resulta tentador hacerlo, porque los tipos están muy bajos. Pero puede tratarse de una señal de alarma.
También he visto a algunas compañías que suelen aumentar sus dividendos todos los años y que el año pasado no lo hicieron. Y en muchos casos se trata de empresas muy apalancadas a las que les empieza preocupar cómo reducir su nivel de deuda. Lo hemos visto en numerosas compañías del sector de la alimentación, lo que nos señala que el crecimiento de las ventas es más difícil en las fases avanzadas del ciclo económico.
– ¿Está adoptando un enfoque más defensivo?
La preservación del principal es una parte importante de la rentabilidad a largo plazo, por lo que siempre estoy pensando en qué medidas adoptar para favorecer la protección frente a las pérdidas. En la actualidad mantengo más liquidez de lo habitual, en parte porque nos encontramos en una fase avanzada del ciclo y en parte porque las valoraciones comienzan a ponerme un poco nerviosa. Aunque es cierto que estoy renunciando a parte del potencial de rentabilidad del mercado, la posición de liquidez puede ayudarme a mitigar la volatilidad; y si se produce una corrección, me permite invertir en compañías buenas con unas valoraciones relativamente atractivas.
Además, estoy analizando cómo se han comportado las empresas en periodos anteriores de caída de los mercados, con el fin de distinguir entre aquellas que siempre o casi siempre han registrado buenos resultados de aquellas otras que no lo han hecho normalmente tan bien. Suele ser una buena idea empezar haciendo preguntas sobre las compañías en las que invertimos o en las que nos estamos planteando invertir. Analizamos los distintos escenarios y tratamos de asegurarnos de que nos estamos protegiendo frente a las pérdidas y, al mismo tiempo, participando en el mercado.