AXA IM anticipa que «la mayor parte del ajuste monetario ha quedado atrás»
Por Chris Iggo, CIO Core Investments de AXA Investment Managers y presidente del AXA IM Investment Institute
La inflación ha sido una mala noticia todo el año. Por ello, el inesperado descenso de la inflación estadounidense en octubre ha sido una buena noticia. Es posible que los mercados hayan reaccionado de forma exagerada ante lo que, admitámoslo, es sólo un dato, pero refuerza un relato concreto. La mayor parte del ajuste monetario ha quedado atrás. Los tipos subirán un poco más y podrían mantenerse altos durante algún tiempo. Pero una vez que lleguemos a una posición en la que el próximo movimiento esperado tenga una alta probabilidad de ser un recorte, la rentabilidad del riesgo en los mercados será más favorable.
Todavía puede haber malas noticias, pero los cuartos trimestres suelen ser positivos para las acciones y los bonos. Este no parece desviarse de esa tendencia. El tono en el nuevo año también podría reflejar eso. Pero hay que tener en cuenta que la inflación sigue siendo demasiado alta y el crecimiento se está ralentizando. Podría ser otro año difícil.
La hora feliz. Los inversores se llevaron una agradable sorpresa el 10 de noviembre. La publicación del informe sobre la inflación de octubre en EE.UU. mostró una inesperada desaceleración del ritmo de aumento de los precios. El índice general subió un 0,4% en lugar del 0,6% previsto, y el índice de inflación subyacente subió un 0,3% en lugar del 0,5% previsto. Tanto la tasa de inflación general como la subyacente se redujeron al 7,7% y al 6,3% respectivamente. Esto fue una buena noticia.
Fue un ‘trago de vodka’ para un mercado ya ligeramente embriagado tras la última ronda de reuniones de los bancos centrales. Con razón o sin ella, los mercados habían llegado a la conclusión de que los bancos centrales estaban dispuestos a poner fin a la primera fase del ciclo de endurecimiento, preparándose para reducir las subidas de tipos de los 75 puntos básicos por reunión que han sido de rigor desde el verano.
Los mercados respondieron de forma muy positiva. La inflación ha sido la principal preocupación de los mercados durante meses. Ha sido inesperadamente fuerte y ha provocado una agresiva subida de los tipos de interés a nivel mundial que, a su vez, ha amenazado con crear una recesión mundial. Es posible que un mes de datos mejores no disipe por completo estas preocupaciones, pero sí refuerza la idea de que la inflación ha tocado techo.
Si además se añade el golpe que la política de [el expresidente de EE UU, Donald] Trump recibió en las elecciones de mitad de mandato en EE.UU. y la retirada de las fuerzas rusas de Jersón, no se puede culpar a los mercados de tener un poco de fiesta de riesgo.