Ann-Katrin Petersen (Allianz GI): Cuando las palomas lloran
Por Ann-Katrin Petersen, vicepresident, Global Economics & Strategy en Allianz Global Investors
Hasta ahora, el año 2021 ha resultado rentable para las clases de activos de riesgo como la renta variable. Sin embargo, no es de extrañar que, en vista de los dos posibles factores de riesgo de finales de año, el apetito de riesgo de los inversores profesionales de todo el mundo haya disminuido –a partir de unos niveles elevados–, como mostró la encuesta a gestores de fondos de Bank of America publicada a principios de la semana.
Aunque las perspectivas económicas y de beneficios para 2022 siguen siendo optimistas, una política monetaria más restrictiva se considera ahora el mayor riesgo. Así lo confirma el hecho de que solo el 55% de los encuestados considera ahora las mayores tasas de inflación como un fenómeno temporal, seis puntos porcentuales menos que en la encuesta de octubre.
Claves de la semana
- En la semana anterior a la Navidad, impera una cierta calma, al menos en lo que se refiere a la frecuencia de publicación de datos.
- En las últimas semanas, los indicadores económicos han apuntado a una estabilización de la dinámica económica mundial. Tras un tercer trimestre débil, la economía de EE. UU., la mayor del mundo, ha recuperado el ritmo. El consumo privado –que representa dos tercios del producto interior bruto en EE. UU.– sigue bien respaldado por un sólido mercado laboral (el gasto de consumo y los ingresos de los hogares, así como las solicitudes iniciales de subsidio por desempleo, se publican el jueves). A diferencia de Europa, donde la fuerte nueva ola de contagios ya ha hecho mella en los ánimos del consumidor (sabremos la confianza de los consumidores el martes), se prevé que la confianza de los consumidores estadounidenses (miércoles) se comporte bien. Para el próximo año, a pesar de la mayor incertidumbre relacionada con la pandemia, mantenemos nuestro escenario de un crecimiento económico mundial más lento, pero aún por encima del potencial, con una continuación de la rotación regional.
- Al mismo tiempo, es de esperar que el debate sobre la inflación prosiga. Las ventas de viviendas de segunda mano (miércoles) y las de viviendas nuevas (jueves) apuntan a algunos signos de sobrecalentamiento en el mercado inmobiliario estadounidense. Últimamente, han aumentado los indicios de que el alza de los alquileres está afectando a la inflación de precios al consumo de EE. UU. La divergencia entre la política monetaria a ambos lados del Atlántico continúa respaldando una apreciación del dólar estadounidense a corto plazo.
- Mientras que muchos bancos centrales han empezado a abandonar su postura de emergencia adoptada desde el estallido de la pandemia, el Banco de Japón mantiene su política monetaria expansiva. La inflación de Japón (viernes) ha repuntado por encima de cero, en particular debido a la fuerte subida de los precios de la energía. Sin embargo, pese a los cuellos de botella de la oferta mundial, la presión subyacente sobre los precios sigue siendo reducida. Hasta ahora, la recuperación económica ha sido demasiado tímida (el PIB se ha contraído en cinco de los últimos ocho trimestres), y el crecimiento salarial, demasiado bajo.