Allianz GI: Estimular un crecimiento económico cada vez más débil
Por Stefan Scheurer, Director, Global Capital Markets & Thematic Research de Allianz Global Investors
Aunque la evolución positiva de los mercados financieros desde principios de año se puede explicar por varios motivos, las rentabilidades no dejan de mostrar un contraste con la situación de la economía mundial. Nuestros indicadores de coyuntura mostraron un nuevo debilitamiento de los datos económicos en el último mes, un contexto en el que también se ha desacelerado el crecimiento económico mundial a una tasa ligeramente inferior a su potencial. Por primera vez en el ciclo económico actual, se invirtió la curva de tipos de EE. UU. (3 meses frente a 10 años), como resultado de las conclusiones «acomodaticias» de la última reunión de la Reserva Federal de EE. UU. (Fed). La posición de esta curva es considerada desde principios de la década de 1950 un heraldo fiable de las recesiones en Estados Unidos, por lo que incrementó la incertidumbre entre muchos inversores e hizo subir la demanda de «refugios seguros», como los bonos soberanos alemanes, el yen japonés o el oro. ¿Ha sonado la hora de la verdad para la economía mundial?
Es evidente que, tras una fase de mayor debilidad de los datos macroeconómicos, ha aumentado la probabilidad de una recuperación económica, al menos a corto plazo, tal como reflejan las estadísticas de exportaciones de algunos países asiáticos. Ahora bien, tales datos funcionan a veces como indicadores de la situación económica de la región asiática, muy impregnada de tecnología, y a partir de aquí, como barómetro de la confianza del comercio mundial. No obstante, en el contexto del Año Nuevo chino, las cifras deben interpretarse con cierta precaución. Aun así, podrían también entenderse como precursoras de las medidas fiscales y monetarias recientemente adoptadas por China. De estas podría esperarse un efecto estabilizador del crecimiento no solo de China, sino también, gracias a sus repercusiones positivas, de toda la región asiática a partir del segundo trimestre.
Mientras que para la guerra comercial y el Brexit ha llegado el momento de la verdad, las últimas declaraciones y medidas de los grandes bancos centrales, como la Fed o el Banco Central Europeo (BCE), llevan a la conclusión de que se está intentando estimular, mediante un cambio de política, un ciclo económico cada vez más débil. Es posible que esto se lleve a cabo a costa de poner trabas al aumento de la inflación y la reducción del endeudamiento. Este cambio de orientación de la política monetaria internacional, las perspectivas de un dólar más débil y una distensión en la guerra comercial, así como los impulsos de crecimiento procedentes de China, podrían seguir respaldando a los mercados. Mientras tanto, la proporción de «alcistas» ha aumentado considerablemente, desde aproximadamente un 30 % a principios de año hasta el 54 % neto actual. Al mismo tiempo, el índice de volatilidad, a pesar de la mayor incertidumbre en torno a la economía mundial, se sitúa un 20 % por debajo de su media histórica.
Asignación táctica de acciones y bonos
- Nuestros indicadores de coyuntura mostraron un nuevo debilitamiento de los datos económicos en el último mes. En este contexto, también se ha desacelerado el crecimiento de la economía mundial, a una tasa ligeramente inferior a su potencial.
- La curva de tipos de EE. UU. (3 meses frente a 10 años) se invirtió por primera vez en el ciclo económico actual, como resultado de las conclusiones «acomodaticias» de la última reunión de la Reserva Federal de EE. UU. (Fed).
- Mientras que para la guerra comercial y el Brexit ha llegado el momento de la verdad, los grandes bancos centrales están intentando estimular, mediante un cambio de política, un ciclo económico cada vez más débil.
- Este cambio de orientación de la política monetaria internacional, las perspectivas de un dólar más débil y una distensión en la guerra comercial, así como los impulsos de crecimiento procedentes de China, podrían seguir respaldando a las clases de activos de riesgo. Esto también queda reflejado por el posicionamiento de los inversores.
- Aunque el índice de volatilidad se sitúa un 20 % por debajo de la media histórica, los momentos de la verdad podrían causar pronto una mayor fluctuación de las cotizaciones.