Si le ha tocado el Gordo, sólo podrá invertir 8.000 euros en un plan de pensiones
Hoy es un día de mucha alegría para unos pocos: Los agraciados con el Gordo, a los que felicitamos cordialmente desde esta edición, pero les recordamos que si quieren dejar una parte de su jugoso premio para su jubilación, tan solo podrán meter 8.000 euros en un plan de pensiones hasta el 31 de diciembre.
Cuando se habla de los premios de la Lotería de Navidad, el término que más se usa es el de “millonarios” y todas las noticias reflejan el goteo de millones por toda la geografía española que dejan los diversos premios, pero luego lo que se puede invertir en fondos de pensiones es muy poco.
¿Cómo invertirlos?
Como ya hemos publicado en elAsesorFinanciero.com, hay muchas opciones de inversión, aun teniendo en cuenta los bajísimos tipos de interés y la fuerte volatilidad de los mercados, pero lo que está claro es que si se quiere invertir para la jubilación en un plan de pensiones o en un plan de previsión asegurado (PPA), tan sólo se podrá destinar 8.000 euros al año del millonario premio.
Los límites a la inversión en estos productos son un lastre para su crecimiento y para la potenciación del ahorro de los españoles, en un momento en que el fondo de reserva de la Seguridad Social languidece y existen todo tipo de dudas sobre la capacidad futura de las pensiones públicas.
Iliquidez de los planes
Estos límites pueden parecer un contrasentido en los tiempos que corremos, toda vez que la falta de liquidez de planes de pensiones y PPA ya evita que se conviertan en unos productos especulativos, dedicados a la inversión pura y dura. La iliquidez deja claro que es un producto de ahorro para la jubilación y no para “ganar rápido y salir”.
El que invierta en estos productos sabe que lo está haciendo para garantizarse un capital cuando llegue el momento de su jubilación, no para especular en los mercados financieros.
Ni siquiera la futura medida normativa que se aplicará a planes y PPA de posibilidad de hacerlos líquidos transcurridos 10 años de la inversión va a modificar la esencia finalista de estos productos, como se ha demostrado con la legislación en el País Vasco, donde existe liquidez a los 10 años para las EPSV de Empleo (equivalente vasco a los planes de pensiones de empresa) y los rescates cuando llegan los diez años son mínimos, lo que demuestra que los inversores ponen su dinero en este producto pensando en el futuro.