Los mercados emergentes acaban de comenzar a recuperar el terreno perdido, según Capital Group
Por Chris Thomsen, gestor de Capital Group.
La estabilidad y los procesos de reforma de los que estamos siendo testigos en países como China y la India favorecen la aparición de nuevas oportunidades de inversión. No me interesan únicamente las opciones más evidentes, como los bancos indios y las empresas chinas de internet, sino también industrias nacionales como el cemento y la electricidad, así como empresas dirigidas al comercio minorista y orientadas al consumo.
La renta variable emergente lleva subiendo más de veinte meses. Desde el nivel mínimo registrado a principios de 2016, las acciones han subido un 70%. ¿Está durando mucho esta fase alcista? Podríamos estar solo al principio.
El aumento de las clases medias, el incremento del consumo y la automatización indican que estos mercados tienen margen de crecimiento»
Una economía mundial en expansión, el fortalecimiento de las divisas y la sólida demanda de componentes tecnológicos favorecen a los mercados emergentes. La sincronización de la economía global ofrece un entorno ideal para estos mercados, similar al periodo que se vivió entre 2003 y 2007.
En un entorno de recuperación como el actual, las valoraciones continúan siendo atractivas en términos históricos y en comparación con los mercados desarrollados. Por ejemplo, China, Taiwán y Brasil cotizan en torno a 13 veces la previsión de beneficios para el año próximo, frente a la previsión de 17 veces para el índice MSCI World. Los flujos de caja de las empresas también están aumentando, lo que podría llevar a revisiones al alza de las ganancias. Se prevé que los beneficios empresariales suban un 13% en 2018, y el aumento de los beneficios suele favorecer al precio de las acciones.