Juan Lladó (Gesconsult): “Fuimos prudentes a principios de 2020 y eso da frutos: Ahora todos nuestros fondos le sacan entre un 5% y un 15% a sus benchmarks”
Juan Lladó García-Lomas, consejero de Gesconsult, analiza en esta entrevista en elAsesorFinanciero cómo se está enfrentando su entidad a la crisis provocada por la pandemia, y los resultados sensiblemente mejores al mercado que están obteniendo en este entorno tan difícil. También nos explica cómo ha sido la trayectoria de la entidad en sus 30 años de historia y su objetivo de superar los 1.000 millones en los próximos 36 meses.
– Gesconsult es una gestora independiente ¿podría resumirme las características y los objetivos que definen a su entidad?
Gesconsult es una firma española independiente de gestión de activos fundada en 1983. Se sitúa entre las primeras entidades nacionales en gestión de fondos de inversión, con un histórico (track record), además de impresionante, con más veteranía del mercado. Su actividad se dirige a inversores particulares y a clientes institucionales (plataformas de distribución de fondos, bancas privadas, EAFs y family offices).
Durante sus más de 30 años de experiencia en gestión, la esencia de su filosofía de inversión se mantiene: invertir en negocios de calidad, bien gestionados y a precios atractivos buscando obtener para nuestros inversores un rendimiento atractivo a largo plazo. A la vez, seguimos muy de cerca la temperatura del mercado para controlar el riesgo y preservar capital en momentos de caídas.
No aspiramos a ser una gestora con producto en todas las clases de activos sino a tener productos de alto valor añadido”
– Ustedes cuentan con una larga trayectoria de 30 años ¿cuál ha sido la evolución de la gestora en estas tres décadas?
Somos independientes, gestionamos de una forma activa y con un objetivo claro de preservación de capital. La mayoría de nuestros inversores lo son desde hace muchos años. Para nosotros, su confianza es nuestra mayor satisfacción. Llevamos a cabo, una gestión flexible de verdad, nuestra independencia nos permite ser libres para invertir allá donde mayor potencial veamos en cada momento. No aspiramos a ser una gestora con producto en todas las clases de activos sino a tener productos de alto valor añadido.
En 2008 vivimos una crisis financiera importante. Antes de que viéramos los máximos del mercado, redujimos el nivel de exposición a bolsa significativamente pues preveíamos un tsunami financiero, estuvimos unos meses por detrás pero luego llegaron las fuertes caídas y nuestro posicionamiento defensivo nos permitió capear mucho mejor el temporal y proteger de este modo el patrimonio de nuestros inversores.
En 2015, Gesconsult lanzó en Luxemburgo dos réplicas de sus fondos más emblemáticos: Gesconsult Renta Variable y Gesconsult Renta Fija Flexible, posteriormente hemos lanzado también la versión luxemburguesa de Gesconsult León Valores.
También Gesconsult entró en el mercado de los planes de pensiones en 2015 con el lanzamiento de Gesconsult Ahorro Pensiones y Gesconsult Equilibrado Pensiones, dos vehículos de ahorro para la jubilación se enmarcan dentro de las categorías renta fija mixta defensivo y renta variable mixto moderado, respectivamente.
En 2016 con el cambio de sesgo del BCE hicimos una apuesta clara por los sectores cíclicos y tuvimos un excelente comportamiento con un gran beneficio para nuestros participes.
Al inicio de 2020 también vimos mucho riesgo en el mercado lo que nos llevó a posicionar nuestras carteras de forma conservadora. En los primeros días del año no subíamos tanto como el mercado, pero la prudencia da sus frutos y ahora todos nuestros fondos le sacan entre 5%-15% a sus benchmarks
– En estos 30 años, ¿habían vivido alguna vez una situación tan difícil como la que estamos atravesando?
A lo largo de los últimos 30 años hemos vivido todo tipo de situaciones, algunas muy complicadas y cada una ha sido distinta de la anterior. En 2008, que también fue una situación de extrema dificultad, el problema fue generado en el sector financiero y acabó afectando a la economía real. En esta crisis, el camino se ha recorrido a la inversa.
La particularidad de esta crisis ha sido la rapidez del movimiento. La incertidumbre y falta de visibilidad, que ya sufrimos en 2008, ha llegado en cuestión de horas. Afortunadamente, también las medidas políticas y fiscales se han aplicado de una manera más inmediata que en 2008, lo que ha supuesto un cierto alivio para los mercados.
Esa incertidumbre y falta de visibilidad que ya hemos vivido en ocasiones anteriores, se plasma no sólo en el impacto económico que va a suponer la práctica paralización de lo economía, sino también las dudas sobre el futuro, la desescalada o los posibles rebrotes. Todo ello, como en pasadas ocasiones, nos ha llevado a ser muy prudentes gestionando esta crisis y seguimos con el mismo posicionamiento.
Nuestra meta es superar un volumen de 1.000 millones de euros en los próximos 36 meses”
-¿Qué medidas han tomado para enfrentarse a la caída de los mercados y la paralización de la economía?
Nuestro posicionamiento antes de la crisis ya era defensivo. Las valoraciones de los activos, la falta de alternativas y la excesiva complacencia que observábamos nos llevaba a mantener un perfil muy conservador. Cuando empezó la crisis sanitaria, dimos un paso más en ese posicionamiento, incrementando el peso en sectores defensivos, aumentando los niveles de liquidez y aplicando coberturas tanto en renta fija como en renta variable.
A lo largo de las últimas semanas de marzo y principios de abril, normalizamos los porcentajes de inversión y retiramos las coberturas, pero seguimos manteniendo un perfil muy defensivo en las carteras. Esta gestión defensiva, como sucedió en 2008, nos ha desmarcado de los benchmarks a los que me refería anteriormente.
Valor añadido de la gestión activa
– En los últimos años, hemos vivido un auge de la gestión pasiva, pero ustedes apuestan por la gestión activa, ¿qué puede aportar este tipo de gestión en un momento como el actual?
El momento actual es un claro ejemplo del valor añadido que supone la gestión activa frente a la pasiva. Cuando asistimos a períodos de volatilidad como el actual, las caídas son indiscriminadas y es en ese entorno donde se generan las oportunidades. Ahora cobra más importancia, si cabe, el análisis individualizado de las compañías para identificar las oportunidades en aquellas empresas cuyos negocios y resultados se ven menos afectados por el Covid-19 y que van a seguir manteniendo dinámicas positivas a lo largo de los próximos años. Hay que tener en cuenta que, por ejemplo, el IBEX 35 lleva una caída en el año del -30% mientras que Gesconsult Renta Variable, fondo de renta variable española, le saca un 14,8% de ventaja, con una caída en el año del -18%.
Desde Gesconsult pensamos que, más que nunca, es hora de invertir en productos dinámicos y flexibles, que permitan adaptarse a la coyuntura económica en todo momento y que a la vez otorguen al cliente un nivel de protección importante.
– Gesconsult prioriza la “preservación del capital” ¿cómo puede conseguirse esto en un entorno de tanta volatilidad?
Los niveles de volatilidad que hemos vivido este año han sido, incluso, superiores a los experimentados en 2008, y ha sido una característica común a la renta fija y a la renta variable. En un entorno así, la preservación de capital total (que el cliente no pierda ni un céntimo) es muy complicada, por no decir imposible. Sin embargo, sí se pueden mitigar las pérdidas y hacer que el fondo en el que está el cliente caiga mucho menos que el mercado. Como comentábamos anteriormente, la mayoría de nuestros fondos han capeado estas caídas con mucha menos volatilidad que sus índices de referencia. Eso tiene un doble efecto sobre el partícipe: primero, saber que su fondo está cayendo la mitad que el índice y, segundo, tener un punto de partida muy superior para incorporarse a la recuperación posterior del mercado.
A lo largo de los últimos 30 años, en estas situaciones de pánico y crisis, nuestros fondos siempre se han comportado de la misma manera, y nuestros clientes siempre han salido reforzados de estas situaciones. A medio y largo plazo, el histórico de nuestros fondos lo demuestra.
Entender las empresas en las que se invierte
– Sus fondos de renta variable han recibido premios en varias ocasiones, como el de Morningstar en 2019 ¿cuáles son las señas de identidad de sus fondos en RV?
La principal seña de nuestra gestión es el entendimiento y el estudio de las compañías que compramos. Invertir en ellas como si fuéramos a ser un socio industrial. Esto no te exime de cometer errores, pero la experiencia nos dice que se minimiza mucho esa posibilidad.
Esto lo complementamos con un análisis macroeconómico profundo, porque para nosotros es fundamental entender el entorno que rodea a los mercados y a las compañías. No se trata de predecir nada, pero sí de comprender las dinámicas en las que nos movemos. Este año, como lo fue 2008 y otros entre medias en menor medida, ha sido un buen ejemplo de cómo esto puede ser un factor que añada valor a la gestión.
– ¿Qué otro tipo de fondos destacaría de su cartera?
En general, nuestra gama de fondos está muy compensada y cubre distintos perfiles de riesgo. La volatilidad que ha sufrido la renta fija, tanto de largo como de corto plazo, ofrece una oportunidad muy buena para entrar en un fondo como Gesconsult Corto Plazo, cuya rentabilidad interna se sitúa ahora por encima del 2%, con un vencimiento muy corto.
En el caso de nuestros dos fondos mixtos, Gesconsult León Valores y Gesconsult Renta Fija Flexible, su posicionamiento más global y su flexibilidad para mezclar renta fija y renta variable, suponen una clara ventaja para adaptarse a un momento como el actual.
Nuestro fondo de Renta Variable España lleva más de una década en las primeras posiciones del ranking. El año pasado recibió el premio al mejor fondo a tres años de bolsa española, y ahora sigue en el número 1 del ranking de 2020.
– ¿Cómo distribuyen sus productos? ¿Cómo puede un inversor hacerse cliente de Gesconsult?
Los fondos Gesconsult se pueden contratar en directo, dándose de alta como cliente en nuestra gestora, o bien a través de las plataformas de contratación de fondos Inversis, Tressis, Selfbank y Allfunds, donde se encuentran a disposición del inversor toda nuestra gama de fondos. También se encuentran disponibles en bancos que ofrecen arquitectura abierta a sus clientes, como es el caso de Andbank.
El proceso de contratación online de nuestros fondos, a través de nuestra página web (www.gesconsult.com), es un proceso muy sencillo, rápido y seguro, gracias a las mejoras que venimos realizando en nuestra web.
– ¿Qué volumen de activos gestionaron a finales de 2019? ¿Cuáles son sus perspectivas para Gesconsult para este 2020?
A finales del ejercicio pasado teníamos un total de 420 millones de euros bajo gestión distribuidos entre particulares directos, particulares a través de plataformas, redes agenciales y fondos de otras instituciones gestionados por nosotros.
Nuestros planes a futuro tienen tres vertientes. Primero, poner en valor el cliente particular que invierte en Gesconsult y mantiene sus ahorros durante décadas. Gesconsult lleva más de 30 años creando valor por encima del mercado (“alfa”) de forma sostenida. El cliente particular entiende muy bien la inversión a medio y largo plazo y se ajusta muy bien a nuestra filosofía: crear alfa sostenido en el tiempo, siempre con la premisa de preservación del capital.
En segundo lugar, seguimos haciendo acuerdos de gestión con clientes institucionales que se benefician del track-record de nuestra mesa de gestión y de análisis.
En tercer lugar, algo que está muy en boca de todos, es el crecimiento inorgánico. Las gestoras de fondos y sociedades de valores están pasando por un período de consolidación que se va a mantener en el tiempo. Con los nuevos requerimientos de los reguladores es imprescindible tener una masa crítica de activos bajo gestión que permita tener las estructuras necesarias.
Nuestra meta es superar un volumen de 1.000 millones de euros en los próximos 36 meses.