Guerra ‘encarnizada’ por los clientes de Credit Suisse España
El rescate de Credit Suisse por UBS, decidido por el Gobierno suizo, tiene ‘víctimas’ colaterales en España. UBS vendió su negocio de Banca Privada a Singular Bank a finales de 2021. La operación incluía una cláusula que demuestra la inteligencia de Javier Marín, su CEO y último consejero delegado de Emilio Botín y primero de Ana Botín en el Santander, y de su equipo: la prohibición de UBS de competir durante tres años con la entidad en Banca Privada en España, salvo que abonara una cuantiosa indemnización.
Esa posibilidad no ha sido descartada por UBS, que considera que el negocio de Banca Privada en España tiene un potencial de crecimiento anual del 6%, que compensaría sobradamente el sobrecoste que debería pagar a Singular Bank por incumplir el contrato.
Otra opción, la más sencilla, es que UBS venda Credit Suisse Wealth Management España una vez que se haga con las riendas definitivas de su otrora gran competidor. Pero se encuentra con que la fuga de profesionales y de clientes, que ya se había iniciado mucho antes de la quiebra de Credit Suisse, se ha acelerado, lo que resta valor a la operación.
Además, el Gobierno suizo ya anunció, con el rescate de Credit Suisse por UBS, que suspendía el pago de determinados bonus a los profesionales del grupo quebrado. Esas bonificaciones, muy habituales en Banca Privada y en Banca de Inversión, son una parte sustancial de la retribución de los empleados, y su supresión es casi una invitación a la desbandada hacia otras firmas.
Este hecho es fundamental para explicar lo que está pasando con la filial española del desaparecido banco suizo. Y para tratar de entender la encarnizada guerra por captar sus profesionales y sus carteras de clientes.
Un factor es el ranking, que en Banca Privada, como en muchas actividades, es un elemento clave. Credit Suisse Banca Privada gestionaba, antes de la crisis de su casa matriz, unos 12.000 millones de euros. La primera posición en esta actividad corresponde a Santander. Para entidades como JP Morgan (15.000 millones en España) o Deutsche Bank (18.000 millones) hacerse con Credit Suisse España supone acercarse a Sabadell (36.000 millones) y distanciarse de incómodos competidores como Andbank (17.300 millones) o Banca March (23.500 millones).
El problema para los potenciales compradores es la tormenta perfecta que sufre Credit Suisse en España. Las especulaciones sobre la matriz son notorias desde hace varios años, prácticamente desde la Gran Crisis de 2007-2008, aunque de una forma más notoria desde 2021, por lo que desde hace tiempo se han acelerado las fugas de profesionales de Banca Privada y también de clientes. De hecho, nadie, incluso dentro de la propia filial, conoce cuál es la situación real en cuanto a volumen gestionado y a número de clientes de ésta.
Al mismo tiempo, cuanto más tarde UBS en venderla más riesgos de fuga tanto de profesionales y de gestores como de clientes habrá, y menos será lo que estén dispuestos a comprar los grupos interesados.
Lombard Odier, la entidad más activa
Porque hay entidades que no se plantean comprar Credit Suisse España, pero sí captar a sus profesionales, siempre que aporten una cartera relevante, y a sus clientes. Una de las más activas en ese sentido está siendo Lombard Odier, que en España gestiona más de 6.000 millones, y que ya ha fichado a Honorato Morales Martín-Cobos, uno de los mejores banqueros privados senior en Credit Suisse España, que aporta una notable cartera de clientes.
Honorato Martín-Cobos llevaba en Credit Suisse desde el año 2004, a donde se fue procedente, precisamente, de UBS (donde trabajó tres años y parece que no quería volver a relacionarse con este grupo). Antes había trabajado otros tres años en Credit Agricole.
Lombard Odier España recibió un gran impulso en septiembre de 2022 con el nombramiento de Iván Basa como director general de la sucursal, y su “fuerte apuesta por la continuidad y el crecimiento en el mercado español” se ha concretado en fichajes de relumbrón (Silvia García-Castaño o Enrique Sanz, entre otros).
Parece evidente que Honorato Martín-Cobos no va a ser la única incorporación procedente de Credit Suisse España.
La gestora de Credit Suisse pierde el 7,5% de sus clientes
En este escenario, Credit Suisse Gestión, la gestora española del banco suizo rescatado por UBS, lanza un sorprendente mensaje de confianza, pese a la pérdida de patrimonio (133,1 millones de euros de reembolsos netos en marzo, cuando el volumen total de dinero gestionado es de 920,2 millones) y de clientes (7,5%, 329 sobre un total de 4.390).
En la gestora matizan que parte de los reembolsos (que no quieren cuantificar) en los fondos de la gestora no han salido, en realidad, de Credit Suisse España, porque su clientes que han pasado a inversión directa o a gestión discrecional de carteras.
El director general de Credit Suisse Gestión, Gabriel Ximénez de Embún, arenga a sus menguantes tropas: “La forma de continuar ganándose la confianza de los clientes es no dejar distraernos por la situación y seguir gestionando todos los días”.
Incluso, se atreven a recomendar a sus clientes invertir en CoCos, los bonos obligatoriamente convertibles en acciones cuando la ratio de capital de máxima calidad baja de un determinado nivel, pese a que han sido los grandes pagadores del rescate de Credit Suisse haciendo perder todo el dinero a sus bonistas, mientras que los accionistas (que deberían ser los primeros en hacerse cargo de las pérdidas) recibirán al menos títulos de UBS.
Los gestores de Credit Suisse España recomiendan también invertir en deuda de entidades financieras, aunque eso sí son “neutrales” en renta variable, también en la de los bancos.
Pese a estos mensajes, en el primer trimestre, según las estadísticas oficiales de Inverco, la gestora de Credit Suisse en España sufrió unas salidas netas de 249 millones en el primer trimestre, lo que representa alrededor del 20% del patrimonio. Entre enero y febrero, los inversores retiraron 116 millones de los fondos de la gestora, y la cifra se elevó a los 133 millones en marzo, cuando la entidad ha sido resuelta y vendida a UBS por parte de las autoridades suizas.
La entidad cerró marzo de este año con 4.061 partícipes, un 7,5% menos que en febrero, y con un patrimonio de 920 millones, un 14,9% menos que el mes anterior, cuando superaba los 1.000 millones. A cierre del primer trimestre de 2022, la gestora tenía un patrimonio de 1.462 millones de euros, por lo que se ha reducido en un 37%.
Desde 2021, cuando estallan una serie de escándalos en el grupo suizo (el ‘hedge fund’ Archegos y los préstamos a Greeensill Capital jamás recuperados, entre otros) la gestora de Credit Suisse en España acumula unas salidas netas de alrededor de 623 millones de euros, entre los 21 millones registrados en 2021 y los 352 millones de 2022.
Una historia de 30 años
La historia de Credit Suisse en España, que dura ya más de 30 años, se acaba, con actividades en Banca de Inversión, Banca Privada y Gestión de Activos a través de 300 profesionales y oficinas en Madrid, Valencia y Barcelona. El declive comienza en 2020, con la marcha de Miguel Mattossian, tras 18 años como responsable de Banca Privada. Entonces llega Íñigo Martos, responsable de Banca Privada para el sur de Europa, que a finales de 2021 se va a Deutsche Bank como CEO para Iberia, lo que explica que el grupo alemán sea de los más conocedores de los entresijos de la filial del grupo suizo.
En 2022 llega, tras una interinidad de Concepción Gómez de Liaño, Pablo Carrasco, con más de 15 años de experiencia en la entidad. Y que proféticamente aseguraba en enero de 2023 que “cuando las circunstancias del mercado generan mucha volatilidad y hay mucha incertidumbre, también por una situación geopolítica complicada, modelos de negocio como el nuestro, basados en el asesoramiento, funcionan muy bien, aunque paradójicamente pudiera parecer lo contrario”.
En Gestión de Activos, en el verano de 2021 se iba Javier Alonso tras 15 años en las entidad, para crear Welcome AM con otros profesionales procedentes de Credit Suisse España. Le sustituyó Gabriel Ximénez de Embún, hasta entonces director de Inversiones y Estrategia.