Fundslink lanza un canal de distribución digital de fondos para ESI, neobancos y marketplaces
Flass (Fundslink Advisory Software Services) es una plataforma de distribución de fondos que combina una pasarela de pagos con un módulo de onboarding y un sistema de recepción y trasmisión de órdenes 100% digitales que permite reducir los costes de distribución. Se integra fácilmente en los sistemas de las entidades, y permite «crear de una manera rápida y eficiente en costes» un canal de distribución digital de fondos y otros productos financieros para Sociedades Gestoras y otras Empresas de Servicios de Inversión, así como para neobancos e incluso marketplaces generalistas, que complemente otros canales que dichas entidades puedan tener activos.
Además, las empresas que lo deseen podrán incorporar el Módulo Flass Brain. Una herramienta que simplifica la selección de fondos de inversión por parte de clientes y la comercialización por parte de banqueros privados. Además, puede proponer ideas de inversión/ahorro y realizar venta cruzada. Flass Brain está basada en técnicas de big data analytics y machine learning. Combina el análisis estadístico de fondos con diversas fuentes de información y puede agregar las posiciones que el cliente tiene en varias entidades para realizar recomendaciones más ajustadas al perfil y necesidades del cliente.
Flass es «customizable como servicio marca blanca, multidioma y multicultural,» lo que significa que puede adaptarse a las particularidades comerciales de cada país y en especial, a las referentes a la normativa local en materia de distribución de productos financieros.
Solución testada y financiada por entidades públicas
Flass ya está instalada actualmente en dos Empresas de Servicios de Inversión a pleno rendimiento, y Fundslink mantiene conversaciones con varios neobancos y EAFs digitales para la distribución de fondos de inversión en formato marca blanca. Flass es una iniciativa apoyada financieramente por ENISA (Empresa Nacional de Innovación) y CDTI (Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial), ambas pertenecientes al Ministerio de Economía e Industria.
Entorno de mercado: la aceleración del gran cambio en el modelo de distribución
Actualmente, en España el 50% de las ESIs no tienen un canal de distribución de venta directa digital. Las plataformas existentes están más enfocadas en la tramitación de órdenes que en proporcionar una experiencia de usuario diferencial que permita incrementar la base de clientes directa, a la vez que reduce los costes de distribución.
El 60% de las empresas encuestadas por McKinsey a principios de abril dijeron que sus nuevos modelos de ventas remotas estaban demostrando ser tan (29%) o más (31%) efectivos que los canales tradicionales. La población ha sufrido una fuerte conmoción emocional por la crudeza de la situación provocada por el coronavirus y porque se ha visto obligada a cambiar sus hábitos. Se está produciendo un proceso de digitalización forzada debido a imposibilidad de establecer relaciones presenciales y procesos de abastecimiento de productos y servicios por canales tradicionales.
El uso de internet ha aumentado en un 40% desde enero en España. El smartphone se ha convertido en un dispositivo aún más inseparable: de 165 minutos de utilización diaria hemos pasado a cuatro horas. Las personas de mayor edad son las que más han incrementado el consumo de información a través del móvil. Prensa online y redes sociales ya superan a medios convencionales como la radio y con mucha distancia a la prensa escrita. Las compras de productos y servicios online y el sector de la mensajería y distribución domiciliaria se han disparado. Los primeros indicadores en China apuntan a la aparición de nuevos mercados y clientes, especialmente los mayores de 36 años de poblaciones pequeñas menos prósperas que las grandes ciudades. Solamente en Italia el comercio online ha aumentado un 81% desde finales de febrero (Fuente: Mckinsey).
El aumento exponencial del teletrabajo durante la época de confinamiento (7 de cada 10 trabajadores están trabajando total o parcialmente desde su domicilio según la consultora GFK) apunta a un aumento del uso de marketplaces y de soluciones de distribución eficientes. En el sector financiero se acentúa la necesidad de aumentar la inversión en formación para clientes sobre los canales de distribución, contratación e interacción digitales. Revisar sus procesos para reducir el consumo e impresión de papel, potenciar la firma digital para todos los procesos y reforzar la ciberseguridad, son entre otros, factores que la sociedad apreciará de manera inmediatamente creciente.
Como en todas las crisis en las que hay un alto grado de incertidumbre, aumenta la preferencia por la liquidez y la comparación de precios y rentabilidades de los productos y servicios. El ahorro tendrá una tasa de crecimiento negativa en una primera fase, pero es ese grado de incertidumbre acerca del futuro el que hará aumentar las tasas de ahorro a medio plazo (tres de cada cuatro encuestados por GFK señalan que van a reducir el consumo de bienes y servicios).
El autoservicio de productos y servicios financieros aumentará, debido a que aumenta exponencialmente la compra de productos de consumo a través de marketplaces. Una vez que los clientes se hayan acostumbrado a abastecerse de productos de consumo en plataformas digitales, se producirá un gran cambio a la hora de consumir productos y servicios financieros. También significa un importante cambio de paradigma en Banca Privada. Disminuirá la atención presencial vs canales digitales, lo que implica una reducción de costes que acabará trasladándose al cliente. La planificación financiera y la gestión de la huella emocional que provoca el brusco cambio de situación, se han convertido en factores claves a la hora de asesorar a los clientes.