El asesoramiento, fundamental para planificar la jubilación y preparar el ahorro a largo plazo
Aunque el plan de pensiones individual continúa siendo el producto de ahorro con mayor popularidad en España, los cambios regulatorios y el contexto actual de inflación al alza y tipos de interés al alza, están provocando un mayor auge en otros. Esta fue una de las principales conclusiones del observatorio ‘Cómo impactarán las subidas de tipos, los cambios regulatorios y la crisis de los mercados en la campaña de Pensiones y Vida 2022’, organizado por SegurosNews.com y el diario Expansión. En este encuentro participaron Ricardo González, director general de Mutuactivos Pensiones; Eva Valero, directora de vida ahorro y pensiones de Caser; Jaime Sobrino, director comercial de Mapfre Inversión; y Julio Fernández, CEO de JubilaMe.
Desafíos importantes
A comienzos de 2022 se hizo efectiva una nueva reducción en la aportación máxima deducible para los planes de pensiones individuales hasta los 1.500 euros. Anteriormente, ya se había rebajado de 8.000 a 2.000 euros. En paralelo, el actual Gobierno ha implementado medidas para impulsar los planes de empleo. Sin embargo, los expertos participante en el evento también subrayaron otros hitos que están impactando con contundencia en los productos de ahorro, las subidas de los tipos, la espiral creciente de la inflación o la crisis económica y en los mercados financieros. De hecho, una de las conclusiones de consenso es que todo este abanico de efectos van a afectar con una especial relevancia a la la campaña de pensiones y seguros de Vida Ahorro.
Si bien no existen las recetas mágicas para el ahorrador en esta coyuntura, Eva Valero afirmó que “hay que poner el foco en la planificación y el asesoramiento de forma consistente» y destacó que, desde la óptica de las empresas financieras “debemos proporcionar formación específica a nuestros equipos para que estén permanentemente actualizados«.
Esta experta, que también subrayó el valor de las aportaciones periódicas para sustentar con mayor solidez la base del ahorro, mostró una evaluación del análisis de la situación actual en línea con lo que expresó Ricardo González: «Nos preocupa sobre todo la inflación y la pérdida de poder adquisitivo que supone, que es el principal enemigo de cualquier ahorrador a largo plazo».
Más incisivo en las consecuencias de los cambios normativos se mostró Jaime Sobrino, quien indicó que «la regulación está afectando en especial a nuestra primera fuerza de ventas, por la necesidad de trasladar las novedades al cliente». En cuanto a la inflación, Sobrino aseveró que «con el tiempo y con la ayuda de la diversificación, seremos capaces de superar en cierto modo estas dificultades: la planificación y el asesoramiento que podemos ofrecer a los clientes es clave».
Sin embargo, Julio Fernández aseguró que «no creemos que el cambio de tipos vaya a influir tanto, pero sí nos preocupa la inflación en la medida en que es inversamente proporcional a la capacidad de ahorro». Por su parte, se mostró optimista acerca de “la mayor concienciación” que existe en la sociedad para preparar económicamente la jubilación.
Alternativas al plan de pensiones
En este contexto, las aseguradoras creen que puede ser interesante canalizar un mayor volumen de ahorro para la jubilación a “las otras muchas alternativas que ofrece la industria más allá de los pensiones”, como señaló Julio Fernández. Entre ellas, se refirió de manera expresa tanto a los planes individuales de ahorro sistemático (PIAS) como a los Unit Linked.
Jaime Sobrino, entretanto, indicó que «estamos apostando por los planes de empleo de promoción conjunta, algo que requiere de un trabajo a largo plazo para generar esa sensibilidad entre las pymes». En cualquier caso, y de manera específica refiriéndose al ahorro individual, apostó por comprender mejor los objetivos de ahorro del cliente, antes de sugerir un producto de ahorro u otro”.
Eva Valero también significó las ventajas que aportan los PPA y abogó por la renta variable a largo plazo, afirmando que “hay que dirigirse a los clientes más conservadores” para ofrecerles productos con un riesgo algo mayor que les sirvan para incrementar su base de ahorro pensando en el largo plazo.
Finalmente, Ricardo González adelantó que en su entidad “lo que estamos haciendo, más que lanzar productos nuevos, es reabrir algunos que han estado en desuso durante los últimos años”. Además, puntualizó que «en el ámbito individual las aportaciones se han reducido por la pérdida de beneficios fiscales, pero estamos siendo capaces de captar nuevos clientes que nos están trayendo su ahorro desde otras entidades».