¿Cómo lucha Schroders contra el cambio climático en colaboración con los bancos europeos?
La política y el comportamiento del mercado se están viendo atravesados por un nuevo paradigma que pone en el centro de las prioridades la lucha contra el calentamiento global. Los bancos son un actor relevante, pues son una de las principales fuentes financiadoras de las emisiones. Por ello, como gestora, pensamos que es esencial comprometerse con los bancos en los que tenemos inversiones.
Para que el mundo alcance la meta del Acuerdo de París (limitar el aumento de la temperatura a 1,5 grados por encima de los niveles preindustriales), los bancos deberán eliminar gradualmente la financiación de actividades que causen emisiones perjudiciales.
La huella de carbono de un banco es bastante pequeña si atendemos al funcionamiento de sus oficinas y sucursales, pero, como proveedores de financiación, los bancos marcan una diferencia crítica en las emisiones de sus clientes y del planeta en general. Las emisiones financiadas son la métrica esencial que deben tener en cuenta los bancos. Varios expertos de Schroders exponen las claves sobre cómo nos involucramos con las entidades en las que invertimos.
Justin Bisseker, analista bancario del equipo de renta variable europeo de Schroders, estuvo durante más de un mes el año pasado en contacto directo con nueve bancos europeos para conocer sus prácticas climáticas:
“El objetivo de la participación era conocer la posición de cada banco en relación con 33 criterios diferentes. Dentro de estos, las áreas más importantes de atención fueron las emisiones financiadas, el establecimiento de objetivos creíbles y plazos para los planes de transición climática, y la divulgación, tanto de las emisiones financiadas, como de los planes de transición. Buscábamos saber qué objetivos se habían fijado ya estas entidades y qué esperar de ellas en los próximos meses. Además, los nueve bancos en los que me involucré son signatarios de la Alianza Bancaria Cero Neto de las Naciones Unidas, que exige a las entidades adaptar sus las carteras de préstamos e inversiones a vías que conduzcan a cero emisiones netas para 2050. Para ello, los bancos deben fijar metas para 2030 centradas en la concesión de préstamos o la inversión en los sectores que emiten más gases de efecto invernadero”, explica Bisseker.
“Durante este ejercicio con los bancos, el principal desafío fue comprobar que esta es un área muy nueva para ellos. En varios casos era la primera vez que un analista de valores como yo les hacía preguntas sobre sus emisiones financiadas o sus planes de transición climática. Para muchos bancos es una curva de aprendizaje darse cuenta de que los inversores se interesan no solo por los beneficios, sino por cómo se obtienen esos beneficios”, añade el analista.
Otra situación desafiante apareció en el momento de la medición de las emisiones financiadas, puesto que no todos los bancos utilizan la misma metodología para hacerlo. Asimismo, en lo que respecta a las metas de reducción de emisiones, algunas entidades bancarias todavía no han sido validadas por un organismo independiente. Sin esta validación, es imposible determinar si las metas fijadas se traducirán o no en un camino hacia cero emisiones netas en 2050.
Encaje de los compromisos en la actividad de participación activa de Schroders
“A principios de 2022, en Schroders publicamos el Engagement Blueprint, que establecía nuestra visión de la participación activa”. Carol Storey, responsable de compromiso climático de Schroders, explica que el clima es uno de nuestros seis temas de compromiso y, dentro de él, destaca la financiación”.
El propósito de comprometerse con este tema es averiguar cómo una institución financiera alineará sus préstamos o inversiones con tecnologías que crecerán rápidamente en una transición hacia cero emisiones netas y que requerirán un mayor apoyo financiero. Y, al mismo tiempo, queremos saber cómo se alejará de las actividades con altas emisiones, que sufrirán los peores vientos en contra en el futuro.
“Esta participación nos ayudó a identificar a los bancos líderes en cuestiones climáticas. También hemos detectado obstáculos en la recopilación de datos, falta de recursos internos disponibles para apoyar esta cuestión y preocupaciones por la falta de una metodología establecida de medición de carteras y fijación de objetivos”,
señala Storey.
¿Cómo ayuda la sinergia con los bancos a seleccionar acciones en las carteras?
Las políticas y decisiones de los bancos en torno a las emisiones financiadas importan porque afectan el valor de las inversiones y al bienestar del planeta. Los bancos que están muy expuestos a la industria de los combustibles fósiles se enfrentan a importantes riesgos financieros, normativos y de reputación como consecuencia de la transición a una economía baja en carbono.
Nicholette MacDonald-Brown, responsable de renta variable mixta europea de Schroders, señala: “Como gestora de carteras especializada en renta variable europea sostenible, busco invertir de una forma que brinde una atractiva rentabilidad para los clientes y que, además, tenga un impacto positivo en la sociedad y en el comportamiento corporativo”.
“El tipo de diálogo entablado con las entidades ayuda a detectar qué bancos se enfrentan a los mayores riesgos a la baja y tendrán que renunciar a muchas de sus actuales actividades de financiación. Al mismo tiempo, también ayuda a descubrir dónde podría crecer cada banco. En definitiva, se trata de trabajar con los bancos para compartir conocimientos, de modo que puedan tomar decisiones mejor informadas”, concluye MacDonald-Brown.
Información importante: Las opiniones expresadas aquí, son las de Justin Bisseker (analista de banca europea), Carol Storey (líder de compromiso climático) y Nicholette MacDonald-Brown (directora de renta variable mixta europea), y no representan necesariamente las opiniones declaradas o reflejadas en las Comunicaciones, Estrategias o Fondos de Schroders y estos pueden cambiar. Este documento tiene fines informativos exclusivamente. La información aquí contenida no se entiende como oferta o solicitud de compra o venta de ningún valor o instrumento afín en este documento. No se debe depositar su confianza en las opiniones e información recogidas en el documento a la hora de tomar decisiones de inversión y/o estratégicas. La información aquí contenida se considera fiable, pero Schroders no garantiza su integridad ni su exactitud. La rentabilidad registrada en el pasado no es un indicador fiable de los resultados futuros. El precio de las acciones y los ingresos derivados de las mismas pueden tanto subir como bajar y los inversores pueden no recuperar el importe original invertido. Publicado por: Schroder Investment Management Limited, Sucursal en España. Publicado por Schroder Investment Management (Europe) S.A., Sucursal en España, c/ Pinar 7 – 4ª planta.28006 Madrid – España. Registrada en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), con el número 20.
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