Stefan Rondorf (Allianz GI): «Las bolsas podrían mantener una actitud de disposición al riesgo»
Por Stefan Rondorf, Senior Investment Strategist, Global Economics & Strategy de Allianz Global Investors
Los mercados mundiales de renta variable actualmente esperan un escenario de fuerte recuperación, y se está consolidando la impresión de que esto podría seguir así hasta que se demuestre lo contrario. En términos fundamentales, la recuperación se basa principalmente en tres pilares: (1) el número de infecciones se está conteniendo, de momento, en la mayoría de países; (2) los indicadores adelantados y datos de movilidad se han estabilizado, y hay esperanzas justificadas de que mejoren en vista de la relajación de las medidas de confinamiento y distanciamiento en muchos lugares. Así lo indica el salto en el componente de las expectativas del índice alemán Ifo (véase el gráfico de la semana), así como las expectativas de confianza del consumidor estadounidense, según la Conference Board; (3) la drástica mejora de las condiciones financieras, gracias a las inyecciones de liquidez masivas de los bancos centrales y las medidas de ayuda fiscal de los gobiernos. Esto se refleja en la disminución de las primas de riesgo de la deuda corporativa y de los tipos del mercado monetario.
Asimismo, hay otras fuentes de esperanza posibles en dos sentidos: por una parte, podría haber unos avances médicos más rápidos de lo esperado relativos al tratamiento o vacuna para el Covid-19; por otra, en las próximas semanas podrían anunciarse nuevos programas de ayudas económicas, esta vez no dirigidos a limitar los daños, sino a estimular la demanda. En Europa, Francia y Alemania han presentado una propuesta para un fondo de ayuda, y algunos países, como Estados Unidos y Alemania, están preparando sus propios paquetes de estímulo (adicionales). En la fase actual de mayor percepción de noticias positivas, los factores de riesgo tienden a pasar a un segundo plano. Sin embargo, el riesgo de una nueva escalada política entre Estados Unidos y China ha vuelto a aumentar sustancialmente en los últimos días, lo que nos recuerda que la disputa comercial aún no se ha resuelto.
Claves de la semana
La semana tiene bastante que ofrecer a los inversores. La atención se centrará en la reunión del Consejo del BCE del jueves y el informe del mercado de empleo de Estados Unidos el viernes. En cuanto al BCE, serán de interés las nuevas previsiones económicas: ¿cómo será de profunda la recesión según los expertos de la autoridad monetaria europea y qué consecuencias tendrá para la inflación? No está claro si el BCE ya anunciará nuevas medidas de estímulo la semana que viene, por lo menos dado que la presión por parte del mercado de capitales ha disminuido considerablemente.
Asimismo, también son de esperar algunas preguntas en la conferencia de prensa relativas a la sentencia del Tribunal Constitucional Federal alemán, que potencialmente limita las futuras acciones de estímulo del BCE. El informe del mercado laboral de EE. UU. debería de reflejar el impacto total de las medidas de confinamiento: la tasa de desempleo podría aumentar hasta en torno al 20%. En la zona euro también se publicarán las tasas de desempleo (el miércoles). Asimismo, sabremos los nuevos pedidos de abril de EE. UU. (miércoles) y de Alemania (viernes), así como el dato definitivo de los índices de gestores de compras de mayo de todo el mundo. Las estimaciones preliminares mostraban una estabilización de los mínimos históricos a unos niveles aún de recesión.
Aprovechar la actitud de disposición al riesgo hasta que se demuestre lo contrario
Mientras no haya argumentos contrarios al escenario de recuperación que anticipan los mercados, las bolsas podrían mantener una actitud de disposición al riesgo, alimentada además por la estabilización del precio del petróleo y unas señales de distensión en los mercados de crédito. La relajación gradual de las restricciones aún permite esperar un recorrido al alza, especialmente por el pesimismo aún bastante marcado de los inversores.
Incluso los sectores más afectados actualmente como los de energía, finanzas, aerolíneas y ocio también podrían empezar a vislumbrar la luz al final del túnel. Desde el punto de vista técnico, una superación de la línea de la media a 200 días del S&P 500 sería una señal importante. No obstante, las elevadas valoraciones del índice, sobre todo en EE. UU., indican que no hay un margen de seguridad ni ningún doble fondo. Los mercados no están preparados para un aumento significativo de nuevos casos de infectados ni una escalada de las disputas geopolíticas.